[energiadecreixent] Observaciones de Naredo sobre la propuesta de decrecimiento

Miguel aljibes a pangea.org
div nov 26 21:18:35 CET 2010


Sembla que la cosa no s'ha llegit bé.

"(...) cuando los objetivos más generales de “*cambio*” y 
“*reconversión*” del sistema económico están todavía lejos de ser 
comprendidos y asumidos por la población. Por lo que *creo que el 
movimiento ecologista tendría que hacer más hincapié en ellos* y en la 
propuesta “mejor con menos”, que sustituye con ventaja a la del 
“decrecimiento”."

Miguel Muñiz


El 26/11/10 11:02, federico demaria escribió:
>
> Naredo hace una critica valida al Decrecimiento.
>
> Del otro lado Giorgios Kallis dice:
> "Pero si su critica es que no hay una medida unica y clara de lo que 
> tiene que decrecer y su slogan preferido es "mejor con menos", yo le 
> preguntaria, "mejor de que con menos de que"? Su slogan tiene los 
> mismos igual problemas para los que critica decrecimiento."
>
> Salut, f
>
>
>
>         FYI.
>         --
>         Observaciones sobre la propuesta de Decrecimiento 	PDF
>         <http://www.ecopolitica.org/index.php?view=article&catid=33:decrecimiento&id=84:observaciones-sobre-la-propuesta-de-decrecimiento&format=pdf&option=com_content>
>         	Imprimir
>         <http://www.ecopolitica.org/index.php?view=article&catid=33:decrecimiento&id=84:observaciones-sobre-la-propuesta-de-decrecimiento&tmpl=component&print=1&layout=default&page=&option=com_content>
>         	E-mail
>         <http://www.ecopolitica.org/index.php?option=com_mailto&tmpl=component&link=aHR0cDovL3d3dy5lY29wb2xpdGljYS5vcmcvaW5kZXgucGhwP29wdGlvbj1jb21fY29udGVudCZ2aWV3PWFydGljbGUmaWQ9ODQ6b2JzZXJ2YWNpb25lcy1zb2JyZS1sYS1wcm9wdWVzdGEtZGUtZGVjcmVjaW1pZW50byZjYXRpZD0zMzpkZWNyZWNpbWllbnRv>
>
>
>         *Por José Manuel Naredo.* Tomadas de Naredo, J.M. (2009) Luces
>         en el laberinto, Madrid, La Catarata, pp. 214-217,
>         respondiendo a una pregunta de Jorge Riechmann en la segunda
>         parte del libro. Desde Ecopolítica, agradecemos a José Manuel
>         su colaboración.
>
>         Jorge Riechmann. ¿Qué opinión te merecen las propuestas de
>         decrecimiento que se han avanzado en los últimos años?, sobre
>         todo en Francia donde han dado origen a cierto movimiento
>         social. Sabes que hay ahí toda una serie de gente, entre los
>         cuáles quizás el más conocido es Latouche, pero con cierto
>         tirón entre el movimiento ecologista también por aquí.
>
>         José Manuel Naredo. Sí claro, conozco esta corriente que
>         empezó enarbolando en Francia la bandera de decrecimiento.
>         Buena parte de su integrantes, y el propio Latouche, forman
>         parte de la asociación “La ligne d’horizon” de “amigos de
>         François Partant”, autor, entre otras cosas, de un libro
>         titulado “El fin del desarrollo” publicado hace un cuarto de
>         siglo y reeditado con el apoyo de esa asociación. Ellos me
>         invitaron, incluso, a dar una charla en París, con motivo de
>         los actos organizados el veinte aniversario de la muerte de
>         Partant. También conozco la extensión de esa corriente de
>         ideas en nuestro país.
>
>         Para responder a tu pregunta, creo que hay que diferenciar si
>         se usa el término “decrecimiento” simplemente para llamar la
>         atención, como título de un libro,… o de una revista, o si se
>         toma en serio como concepto para articular sobre él una
>         verdadera meta o alternativa al actual sistema económico. En
>         el primer caso el empleo de la palabra podría ser acertado.
>         Este es, por ejemplo, el caso de la revista que se publica en
>         Francia con el título “La decroissance”: se trata de una
>         revista de crítica radical del desarrollismo imperante, que
>         hace bien en subrayar con tintes surrealistas los absurdos que
>         la mitología del crecimiento conlleva y en utilizar ese título
>         a modo de desafío o de provocación frente al pensamiento
>         económico ordinario. Ese fue también el caso del libro que con
>         ese título ─(Demain) La décroissance─ publicó hace treinta
>         años, y reeditó hace más de diez, mi amigo Grinevald, en el
>         que introducía y traducía al francés algunos textos clave de
>         Georgescu-Roegen y del que conservo un ejemplar dedicado por
>         el autor. Ese título respondía más a una ocurrencia
>         publicitaria provocadora, orientada a pillar a contrapié la
>         palabra y el mito del crecimiento económico, que a un intento
>         serio de proponer el decrecimiento como meta o alternativa.
>         Pues ni la introducción, ni los textos presentados en el
>         libro, tejen en torno al decrecimiento ninguna propuesta o
>         enfoque alternativo. La palabra a penas figura en el texto y,
>         desde luego, brilla por su ausencia en el “programa
>         bioeconómico mínimo” propuesto por Georgescu-Roegen. Por lo
>         tanto, resulta engañoso presentar a ambos autores como
>         pioneros del decrecimiento como propuesta.
>
>         En lo referente al segundo de los usos indicados, tengo que
>         decir que *me parece desacertada la elección del término
>         decrecimiento *para articular sobre él un enfoque económico
>         alternativo al actualmente dominante. Pues para que un término
>         con pretensiones políticas cumpla bien esa función, necesita
>         tener a la vez un respaldo conceptual y un atractivo
>         asegurados, de los que carece el término decrecimiento.
>
>         La noción ordinaria de crecimiento económico encuentra ese
>         respaldo conceptual en el reduccionismo pecuniario de la idea
>         usual de sistema económico y de los agregados que lo
>         cuantifican en el sistema de cuentas nacionales. Ya vimos que
>         la mitología del crecimiento se apoya en la metáfora de la
>         producción, que oculta el lado oscuro e indeseado del proceso
>         económico. Ya comentamos que lo que se entiende normalmente
>         por crecimiento no es otra cosa que el crecimiento del
>         producto o renta nacional. Y en este marco de referencia, el
>         decrecimiento tiene también nombre propio: se llama recesión y
>         conlleva la caída de esa renta o producto nacional y el
>         empobrecimiento del país, con consecuencias sociales
>         generalmente indeseadas. Por lo que, de entrada, el objetivo
>         del decrecimiento no puede resultar atractivo para la mayoría
>         de la población. Pero la idea general del decrecimiento
>         tampoco encuentra solidez conceptual fuera del reduccionismo
>         propio del enfoque económico ordinario. Pues desde los
>         enfoques abiertos y multidimensionales de la economía
>         ecológica, o desde lo que yo llamo el enfoque eco-integrador,
>         no hay ninguna variable general de síntesis cuyo crecimiento,
>         o decrecimiento, se pueda considerar inequívocamente deseable.
>         Esto lo explicaba ya con claridad en la primera edición de mi
>         libro La economía en evolución, de 1987. En el último
>         capítulo, sobre los nuevos enfoques de lo económico, señalaba
>         que los elementos que componen mi propuesta de enfoque
>         ecointegrador, al no ser expresables en una  única magnitud
>         homogénea, no pueden dar lugar a ningún saldo o indicador
>         global cuyo crecimiento (o decrecimiento) se estime
>         inequívocamente deseable. Y por este mismo motivo el enfoque
>         ecointegrador no debe asumir tampoco el objetivo del
>         “crecimiento cero”, que entonces estaba de moda, como tampoco
>         el del “decrecimiento” que ahora lo sustituye. Pues la
>         reconversión propuesta del sistema económico entrañará, sin
>         duda, la expansión de ciertas actividades y la regresión de
>         otras, el uso acrecentado de ciertos materiales y energías y
>         la regresión de otras. Por ejemplo, desde este enfoque tiene
>         sentido proponer la reducción del consumo de energía fósil y
>         contaminante, pero no el de la energía solar y sus derivados
>         renovables, que se acaban disipando igual aunque no se usen.
>
>         De ahí que el movimiento ecologista que defiende el
>         decrecimiento, tiene que empezar a ponerle apellidos para que
>         el objetivo resulte inteligible y razonable desde fuera del
>         enfoque económico ordinario. Se dice así defender el
>         decrecimiento del consumo o la exigencia de energía fósil y
>         contaminante, de determinados materiales,… o de la generación
>         de residuos, sin erosionar la calidad de vida de la gente.
>         Pero el objetivo de hacer que decrezcan las exigencias
>         materiales del proceso económico, coincide grosso modo con el
>         de la llamada “desmaterialización” de la vida económica. Y
>         creo que estos objetivos quedarían mucho *mejor expresados por
>         eslogan “mejor con menos”,* puesto que hace referencia a una
>         ética de la contención voluntaria, no solo medida en términos
>         físicos, sino también pecuniarios y de poder, a la vez que
>         afirma el disfrute de la vida.
>
>         Considerando como subraya Georgescu-Roegen, que la Tierra es
>         un sistema cerrado en materiales, lo que permite verla como un
>         gran almacén de recursos naturales, el creciente uso y
>         deterioro de estos recursos que genera la actual civilización
>         industrial, no puede menos que apuntar a una merma en las
>         disponibilidades y a un menor uso futuro de los mismos. Desde
>         esta perspectiva el “decrecimiento” en el uso de determinados
>         recursos será el horizonte obligado hacia el que apuntan de
>         las tendencias en curso. Aprovechando esta evidencia, Serge
>         Latouche propone prever y planificar este “decrecimiento” para
>         evitar que se produzca de forma dramática y habla de la
>         necesidad de aplicar una lógica económica diferente para
>         conseguirlo, que es lo que yo vengo proponiendo desde hace
>         tiempo. Llegados a este punto, creo que el principal objetivo
>         a plantear es cambiar esa lógica y reconvertir el metabolismo
>         económico de la sociedad. El problema estriba en que anteponer
>         el objetivo del decrecimiento genera confusión cuando
>         permanece en vigor la mitología del crecimiento y cuando los
>         objetivos más generales de “cambio” y “reconversión” del
>         sistema económico están todavía lejos de ser comprendidos y
>         asumidos por la población. Por lo que creo que el movimiento
>         ecologista tendría que hacer más hincapié en ellos y en la
>         propuesta “mejor con menos”, que sustituye con ventaja a la
>         del “decrecimiento”.
>
>
>
>
>     -- 
>     *
>     *Jesus Ramos-Martin*
>     Departament d'Economia i d'Historia Economica,
>     Universitat Autonoma de Barcelona,
>     Edifici B, Campus UAB,
>     08193 Bellaterra, Spain
>     Tel: +34 935814104; Fax: +34 935812012
>     http://www.jesusramos.org
>     *
>
>
>
>
> -- 
> Giorgos Kallis,
> ICREA Professor,
> ICTA, Universidad Autonoma de Barcelona,
> ETSE,  QC/3103
> 08193 Bellatera, Barcelona, Spain
> tel: (0034) 93-581 3749
> www.icrea.cat/Web/ScientificStaff/Georgios-Kallis--481 
> <http://www.icrea.cat/Web/ScientificStaff/Georgios-Kallis--481>
> www.eco2bcn.es <http://www.eco2bcn.es>
>
>
> _______________________________________________
> energiadecreixent mailing list
> energiadecreixent en llistes.moviments.net
> https://llistes.moviments.net/listinfo/energiadecreixent
>    

------------ pr�a parte ------------
Se ha borrado un adjunto en formato HTML...
URL: <http://llistes.moviments.net/pipermail/energiadecreixent/attachments/20101126/be70e46e/attachment.htm>


More information about the energiadecreixent mailing list