[LaCrisi-paguinElsRics] EL DERECHO A DECIDIR EN CATALUNYA HOY (http://marxismo-hoy en blogspot.com)
Jose Maria Rodriguez Gomez
josemaria_rod en hotmail.com
Mie Dic 30 08:39:23 CET 2009
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EL DERECHO A DECIDIR EN CATALUNYA HOY
Referéndum por la independencia de Catalunya en Arenys de Munt (2009)
“La clase obrera es la que menos puede hacer un fetiche del problema nacional, porque el desarrollo del capitalismo no despierta necesariamente a todas las naciones a una vida independiente. Pero, una vez surgidos los movimientos nacionales de masas, desentenderse de ellos, negarse a apoyar lo que en ellos hay de progresivo significa caer, en realidad, bajo la influencia de prejuicios nacionalistas, es decir: considerar a "su propia" nación como "nación ejemplar" (o, añadiremos nosotros, como nación dotada del privilegio exclusivo de organizarse en Estado)”
El derecho de las naciones a la autodeterminación (V. I. Lenin, 1914)
La debilidad del proletariado en Catalunya, la inexistencia del partido comunista, posibilita que hoy la alternativa visible para las masas en Catalunya al estado de la dictadura del capital monopolista español, no sea aún la revolución socialista de la clase obrera y los pueblos de España, que por supuesto aplicará la autodeterminación sin trampas, sino la independencia promovida por amplios sectores populares.
A esta situación la contribuido enormemente la actitud dogmática en lo ideológico y reformista en lo político de todos los grupos que hoy se reclaman del marxismo leninismo en España, que han estado durante los últimos decenios considerando al PSOE como partido “socialdemócrata” o “de izquierdas con política de derechas”, mientras consideraban de derechas junto al PP, o incluso “integrantes de la oligarquía” a los partidos nacionalistas PNV, CiU y sus respectivas burguesías. No es ningún secreto que el motivo práctico de ese “análisis” monopolista de los “marxistas leninistas” que consideran al máximo representante de la dictadura monopolista e imperialista española y de su aparato estatal, el PSOE, “a la izquierda” de las burguesías nacionalistas, ha sido la debilidad ideológica de los comunistas que les ha llevado incluso a aceptar el soborno proveniente del PSOE, en forma de puestos de trabajo, viviendas sociales, pensiones de “larga enfermedad” ficticias y demás subvenciones y corrupciones mafiosas a cambio de “lealtad” “contra la derecha”, así como el temor de los comunistas de café a construir consecuentemente un partido revolucionario que dirija a las masas en sus luchas, en vez de un grupo de charlatanes de teoría “marxista-leninista”.
El referéndum popular sobre la independencia de Catalunya celebrado primero en Arenys de Munt y posteriormente en más de 160 poblaciones de Catalunya y otros que se celebrarán en los próximos meses, han sido la consecuencia de toda una serie de agravios del capital monopolista español contra Catalunya, frente a los cuales no ha habido un partido comunista activo, y en algunos casos algunos grupos han sido cómplices. Los desastres de los servicios del estado en Catalunya, RENFE, aeropuerto, contraste de financiación respecto a Madrid, energía eléctrica, humillaciones políticas varias y campañas en el resto del estado para exaltar la xenofobia anti catalana, etc. etc. han sido recogidos por los diferentes sectores populares y de la burguesía catalana para iniciar un proceso que solo puede culminar, antes o después, de una u otra manera, en el referéndum en toda la nación catalana sobre su independencia.
Sin embargo, uno de los factores esenciales del descontento social, el aumento del paro, la crisis provocada por el capitalismo, la vivienda de precios inaccesibles, ha sido silenciada por esa burguesía, demostrando con ello que su “aportación” a la alternativa independentista tiene un carácter de clase burgués que aspira a convertirse en monopolista dentro de Catalunya sin tocar las relaciones de producción ni los sistemas de distribución (“una democracia social” al igual que la constitución española) y atada a la dictadura imperialista europea de los monopolios.
Los grupos que se reclaman “comunistas” continúan estando al margen de las luchas de las masas y sus problemas, limitándose unos a declaraciones grandilocuentes y “campañas internacionalistas” y otros a captar militantes para la “vanguardia del proletariado” al margen de las luchas proletarias y plenos de soberbia sectaria borrando todo el pasado de las luchas de masas en España. En esa situación, el sentimiento nacional se expande por amplios sectores populares en Catalunya (al igual que en Euskadi y Galicia), colocando un velo que oculta las cada vez mayores contradicciones sociales de clase, mientras en el resto de España, arrecian los enfrentamientos xenófobos entre las diferentes regiones y nacionalidades, estimulada por el capital monopolista a veces en alianza y otras con la pasividad de la “izquierda” y “extrema izquierda” oportunista..
No existe contradicción entre la organización del partido comunista partiendo de las luchas concretas de las masas obreras y populares hacia el socialismo y la lucha por la realización del derecho de autodeterminación. Precisamente la organización del partido comunista es lo que dará un verdadero carácter popular al derecho de autodeterminación, impidiendo que la burguesía la utilice como coartada para mantener los privilegios de clase.
Además la experiencia de los años 70 demuestra que la influencia mayor o menor de la burguesía nacionalista en el movimiento popular en naciones como Catalunya, dependerá de la fortaleza del partido comunista. En la medida que el partido comunista sea una realidad implantada orgánicamente en la lucha de las masas, la influencia de la burguesía decrecerá.
Y en la medida que la revolución socialista destruya el estado imperialista burgués (se trata de destruir el estado monopolista español y no sólo de separarse de él como quiere la burguesía catalana) para construir el nuevo estado, se aniquilará la vieja opresión contra Catalunya y su pueblo tendrá realmente poder para decidir si quiere simplemente cambiar de explotador o si realmente desea eliminar la explotación y tomar el poder junto con sus hermanos del resto del Estado.
Pero ¿qué postura adoptar si el derecho de autodeterminación en Catalunya se ejerce con el capital monopolista español en el poder del estado y sin perspectiva cercana de una alternativa socialista real?
No hay que decir que la decisión del pueblo en un referéndum de autodeterminación en Catalunya, sea cual sea ésta, debe ser acatada por los comunistas y por el resto de la sociedad en Catalunya y en el conjunto de España, pero los comunistas como decía Lenin, a diferencia de la burguesía, no pueden hacer “un fetiche de la cuestión nacional”, siempre han de tener libertad para defender democráticamente la opción que más interese al pueblo en cada momento para avanzar hacia la construcción socialista en todo el actual estado español. En caso de producirse el referéndum en las condiciones actuales, la posición de independencia puede ser adoptada como forma de debilitar el estado monopolista, eliminar el velo nacionalista que oculta las contradicciones de clase en Catalunya y hacer avanzar la revolución socialista en todo el estado.
Pero esa es una situación que sólo puede analizarse cuando se produzca y no están claras aún bajo qué condiciones los monopolios europeos aceptarían forzados un referéndum autodeterminista en Catalunya, ni tampoco la fortaleza del movimiento popular de Catalunya en ese momento, ni tampoco el factor decisivo, la fortaleza del movimiento comunista y movimiento obrero y popular en el conjunto del estado español, que sería lo único que garantizaría plenamente la democracia en dicho referéndum. Defender la autodeterminación siempre, pero la opción concreta a defender en ese referéndum depende de muchos factores aun sin dilucidar.
En todo caso, el proceso ya iniciado de consultas populares en los pueblos de Catalunya sobre la independencia, pone en primer plano, la necesidad de impulsar las Asambleas Populares en los barrios como germen del futuro Poder Popular. Eliminar la influencia decisiva actual de la TV monopolista o de la burguesía nacional como factor clave en la elección de los representantes políticos es de importancia estratégica para los comunistas y la clase obrera y el pueblo. La cuestión de la reforma electoral no debe plantearse sólo en torno a listas abiertas o cerradas.
LAS ASAMBLEAS POPULARES COMO BASE DEL SISTEMA ELECTORAL Y DE PODER EN LA CATALUNYA CON DERECHO A DECIDIR
Las Asambleas Populares en los barrios, sobre la que hay una rica experiencia en España desde la segunda mitad del siglo pasado en torno a las Asociaciones de Vecinos, pueden ser el órgano decisorio de base del pueblo en todos los aspectos de la vida. Si lo ha sido bajo la dictadura del capital monopolista de estado, con mayor derecho debe serlo en la nueva sociedad. Y no sólo en los temas de lucha y movilización de masas, sino también en el aspecto determinante del poder y la forma de cómo el pueblo puede decidir sus representantes en ese poder..
Actualmente se habla mucho por parte de los partidos burgueses en Catalunya de la necesidad de la “reforma electoral” como forma de eliminar la “desafección” hacia la “clase política” (como si los políticos pertenecieran a una sola clase). Incluso algunos de ellos hablan de implantar las listas abiertas.
Las listas abiertas se han utilizado ya por el movimiento popular de algunas asociaciones de vecinos en Barcelona en las décadas de los 1980 y 1990 como forma de legitimar incluso electoralmente las movilizaciones de masas y sus luchas por los problemas concretos y como contrapunto a las elecciones burguesas tuteladas por los medios monopolistas de TV, prensa y radio.
Elecciones por sufragio universal en lista unitaria abierta de la Junta de la Asociacion de Vecinos Trinitat Vella (1996)
Es en ese marco, en los barrios, donde las listas abiertas tendrían su mayor sentido para elegir a todos los representantes políticos y judiciales, conocidos por las masas por ser vecinos comunes y no figurines del marketing televisivo o siniestros agentes promocionados por quien más dinero y poder tiene, como ocurre en la actualidad. Si además esos representantes elegidos están sometidos a poder ser revocados por las Asambleas Populares, ello determinaría una representatividad incluso formal cien veces más democrática que la actual.
Quienes hoy defienden con entera justicia el “derecho a decidir” de Catalunya no deberán oponerse al derecho a decidir electoralmente en las Asambleas Populares como organizaciones de base del pueblo, donde los partidos podrían presentar a sus candidatos, pero también podrían hacerlo las personas individuales de diferentes ideas y criterios en listas abiertas y unitarias.
Jose Maria Rodriguez
Ver tambien en http://marxismo-hoy@blogspot.com "Las Asociaciones de Vecinos como germen del futuro Poder Popular"
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