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<br><br><hr id="stopSpelling">Date: Wed, 21 Jan 2009 13:46:09 +0100<br>Subject: Confesiones de un soldado israelí--Tratamos a los Palestinos como animales]<br>From: leonortaboada6@gmail.com<br>To: roal@nodo50.org; mpalomares75@hotmail.com<br><br>
<div class="EC_gmail_quote"><br>Confesiones de un soldado israelí: "Tratamos a los palestinos como<br>animales"<br><br>por Hernan Zin<br>20 julio 2006<br><br>Comienzan a surgir en la sociedad israelí las primeras voces contra la<br>
guerra. El domingo, una marcha en Tel Aviv para pedir el final de los<br>bombardeos en Gaza y el Líbano. Hoy, una noticia que conmocionó a la<br>opinión pública: el sargento Itzik Shabbat anunció que se negaba a<br>participar en la ofensiva contra Beirut, "Lo hago para oponerme a esta<br>
locura y para romper con la ilusión de que todos estamos a favor de esta<br>guerra innecesaria basada en mentiras", afirmó este joven reservista de<br>28 años que vive en Sderot, ciudad próxima a Gaza en la que suelen caer<br>
los misiles Qassam de Hamás.<br><br>Se acerca la hora del regreso a Gaza. Apuro las últimas entrevistas en<br>Jerusalén. En un café de Jaffa Road, me encuentro con Yehuda Shaul,<br>fundador de la ONG Breaking the Silence (Rompiendo el silencio).<br>
<br>"Todo es una locura: la ocupación, la forma inhumana en que tratamos a<br>los palestinos", me dice. "En Israel entras al ejército con 18 años<br>porque quieres luchar contra el enemigo de tu país, porque quieres dejar<br>
tu marca en la historia, y haces lo que te dicen, sin pensar. Y allí<br>todo te ayuda para que no pienses. Misiones que cumplir, órdenes que<br>seguir".<br><br>"Y no ves a los palestinos como seres humanos, los ves como animales.<br>
Entras a su casa durante la noche, los despiertas, les gritas, las<br>mujeres allí, los hombres allí, y rompes todo. Son cosas que no harías<br>aquí en Israel, pero las haces allí. Y, para poder hacerlo, niegas la<br>realidad. Es la única forma. Creas entre tú y la realidad un muro de<br>
silencio".<br><br>"Te pongo otro ejemplo: si encuentras en la noche un paquete sospechoso<br>que puede ser una bomba, llamas al primer mohamed que encuentras en la<br>calle y le dices que lo abra. Podrías llamar a un experto que lo<br>
desactivase, tardaría diez minutos en venir, pero mejor hacer que un<br>palestino se juegue la vida, ya que para ti es lo mismo, no lo ves como<br>un ser humano. Yo hacía eso con mis soldados en Hebrón".<br>"Y también en Nablus, cuando quería entrar a una casa, si pensaba que<br>
podía haber una bomba trampa, cogía al mohamed de turno y lo obligaba a<br>que abriera la puerta. Es parte de la rutina del ejército: usar a los<br>palestinos como escudos humanos".<br><br>"Lo mismo cuando estás en un check point, los obligas esperar mucho más<br>
de los necesario, a veces durante horas, y coges a un palestino al azar<br>y le das una paliza, de cada quince o veinte que pasan, para que el<br>resto tenga miedo y esté tranquilo. Sólo así, tú que estás con cuatro<br>soldados más los dominas a ellos que son miles".<br>
"Y cuando entras a Gaza con el carro de combate y ves un coche nuevo,<br>aunque tengas espacio en la carretera, pasas por encima. Y también<br>disparas a los tanques de agua. Para meterles miedo, para que te<br>respeten, porque esa es la lógica de lo que nos enseñan a los soldados<br>
israelíes".<br><br>"Además, eres joven y empiezas a disfrutar de ese poder, de que la gente<br>haga todo lo que les digas. Es como un video juego. Estás en un check<br>point en medio de la ruta, tienes a veinte coches esperando, y con sólo<br>
mover el dedo hacen lo que tú quieras. Juegas con ellos. Los haces<br>avanzar, retroceder. Los vuelves locos. Tienes 18 años y te sientes<br>poderoso".<br><br>"Tres meses antes de abandonar el ejército, dirigía una unidad en<br>
Hebrón, había hecho una buena carrera, así que tenía tiempo libre. Una<br>mañana me miré ante el espejo y comprendí que todo aquello era un error<br>y supe que no podría seguir adelante con mi vida si no hacía algo. Por<br>
eso, apenas salí, junto a los soldados de mi unidad, montamos una<br>exposición con nuestras fotos, se llamaba Traer Hebrón a Tel Aviv".<br><br>"Cayó como una bomba en la sociedad. Vinieron parlamentarios,<br>periodistas. Pasaron siete mil personas. Entonces creamos Breaking the<br>
silence, donde damos espacio para que los soldados cuenten los abusos<br>que cometen sistemáticamente. Más de 350 lo han hecho. Ahora tenemos<br>exposiciones y vídeos en Europa, en Israel".<br><br>"Alguna gente dice que son casos aislados. Las madres dicen: mi hijo,<br>
que está ahora en el ejército es bueno, no hace estas cosas, esto sólo<br>lo hacen los soldados beduinos o los etíopes. Pero no es cierto. Todos<br>las hacemos, porque es la lógica de la ocupación israelí: aterrorizar a<br>
los palestinos".<br><br>"Los check points no sirven para detener a los palestinos de entrar a<br>Israel, es para que la realidad no entre a Israel. Porque esta es una<br>sociedad de soldados, todos pasamos por el ejército tres años cuando<br>
somos jóvenes y luego un mes al año. Y todos hacemos eso. Por eso existe<br>el muro de silencio, de negación, porque todos somos responsables y no<br>lo queremos admitir".<br><br>"Ellos son las víctimas, nosotros los victimarios. Pero como<br>
victimarios, también pagamos un precio. Esta es una sociedad que no se<br>anima a mirar a los ojos a la verdad, a sus propios actos. Es una<br>sociedad, como consecuencia, moralmente enferma".<br><br>Para ver artículo con fotos:<br>
<a href="http://blogs.20minutos.es/enguerra/post/2006/07/20/confesiones-un-soldado-israeli-tratamos-los-palestinos">http://blogs.20minutos.es/enguerra/post/2006/07/20/confesiones-un-soldado-israeli-tratamos-los-palestinos</a><br>
<br><br><br><br><br><br><br><br><br><br></div><br><br /><hr />Charlas más divertidas con el nuevo <a href='http://download.live.com' target='_new'>Windows Live Messenger</a></body>
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