<!DOCTYPE html PUBLIC "-//W3C//DTD HTML 4.01 Transitional//EN">
<html>
<head>
</head>
<body bgcolor="#ffffff" text="#000000">
<br>
<h1 style="margin-left: 0in; text-indent: 0in;"><span
class="Apple-style-span" style="font-size: 12px;">En estos momentos,
se está realizando en Doha, Qatar, la Conferencia internacional de
NN.UU. sobre Financiación para el Desarrollo, evaluando los compromisos
hechos por la comunidad de naciones en 2002, y reflejados en el
Consenso e Monterrey, y buscando establecer nuevos compromisos para los
próximos años. La reciente explosión de la crisis financiera de los
mercados ha hecho trizas el ya de por sí poco entusiasmo de los países
más enriquecidos para siquiera cumplir con los compromisos de
cooperación para el desarrollo (El acuerdo de comprometer el 0,7% de
sus PIB en planes de "ayuda" fue hecho a principios de la década de los
'70 - y hasta la fecha, apenas arraña un 0,3%). </span></h1>
<h1 style="margin-left: 0in; text-indent: 0in;"><font
class="Apple-style-span" size="3"><span class="Apple-style-span"
style="font-size: 12px;">Además, los acuerdos realizados a nivel del
G-20 en Washington, DC , el 15 de noviembre, rescatando al FMI y al BM
del proceso de deslegitimación y relegamiento en el cuál se
encontraban, está dificultando aún más en Doha, cualquier acuerdo que
reconoce el papel criminal de esas instituciones y la necesidad de
avanzar con la creación de otras.</span></font><span
class="Apple-style-span" style="font-size: 21px;"></span></h1>
<h1 style="margin-left: 0in; text-indent: 0in;"><font
class="Apple-style-span" size="3"><span class="Apple-style-span"
style="font-size: 12px;"><i>Jubileo Sur , </i>junto con otras redes y
organizaciones integrantes de la Campaña Internacional Sur-Norte frente
a la Deuda Ilegítima,<i> </i>ha estado presente en los preparativos
para esta Conferencia, insistiendo en la necesidad de que se encare la
situación de deuda ilegítima y la todavía apremiante urgencia de
anulación completa e incondicional de las deudas aún reclamadas a los
países del Sur. Durante el Foro de la Sociedad Civil y la Conferencia
de los gobiernos, ha participado con una delegación tricontinental. A
continuación compartimos el texto circulado por JS a todos los
gobiernos, durante la conferencia. Se invita su difusión; sus
comentarios y sugerencias al respecto están siempre bienvenidos.</span></font></h1>
<h1 style="margin-left: 0in; text-indent: 0in;"><span
style="font-size: 16pt;" lang="ES">Financiamiento
Alternativo para el Desarrollo de las Personas,no de las Ganancias<o:p></o:p></span></h1>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">La humanidad y
el mundo del que somos parte, hoy se encuentra ante un
peligroso abismo. Mientras que las crisis financiera, alimentaria, climá</span><span
style="font-family: Times;">tica</span><span style=""> </span><span
style="" lang="ES">y
energética están llevando a millones de personas a más hambre,
desempleo y
desesperación, profundizando la brecha entre los que sobre-consumen y
los que
sufren las consecuencias, y poniendo en peligro el equilibrio de la
naturaleza,
los dirigentes gubernamentales, en particular en el Norte, parecen
obsesionados
solamente con la manera de salvar un sistema económico y financiero,
cuya
esencia es el centro de las múltiples crisis. La reciente reunión y las
conclusiones del G20 en Washington, DC, con exclusión de la mayor parte
de los
países y de los pueblos del mundo y eligiendo reforzar los mismos
principios,
prácticas e instituciones que han producido ese terror y devastación,
no
resolverán los problemas que tenemos ante nosotros.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">Se necesitan
nuevas ideas y nuevas medidas. Junto con otras organizaciones
populares y movimientos de todo el mundo, Jubileo Sur llama a los
gobiernos
reunidos ahora en Doha a hacer frente al desafío de cambiar el rumbo.
Las
alternativas para el desarrollo de las personas y el planeta, no el
lucro, son urgentes
y posibles, reconociendo que la supervivencia incluso de los pocos
demanda
igualdad, sustentabilidad y justicia para todos y todas. Los dirigentes
del
mundo han demostrado que no hay falta de financiación, es sólo una
falta de
sabiduría y voluntad política lo que obstaculiza el camino.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin: 6pt 0in; text-indent: 0in;"><span
style="font-size: 14pt;" lang="EN-US"><b>1.<span
style="font-family: "Times New Roman"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: normal; font-size: 7pt; line-height: normal; font-size-adjust: none; font-stretch: normal;">
</span></b></span><span style="font-size: 14pt;" lang="EN-US"><b>El </b></span><span
style="font-size: 14pt;" lang="ES"><b>Consenso</b></span><span
style="font-size: 14pt;" lang="EN-US"><b> de Monterrey <o:p></o:p></b></span></p>
<div class="MsoNormal"><span lang="PT-BR"> <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal"><span lang="PT-BR">En 2002, las Naciones Unidas
celebró la
Conferencia de Financiación para el Desarrollo (FpD) que dio lugar al
Consenso
de Monterrey con el fin de obtener apoyo financiero y político para
satisfacer
las Metas de Desarrollo del Milenio. Se trató de una iniciativa
importante para
promover una negociación multilateral y forjar nuevas alianzas para
lograr una
distribución más equitativa mundial de gobernanza económica y
financiera. Pero
la tarea no fue abordada como una cuestión de justicia, teniendo en
cuenta la
obligación de los países y de los intereses empresariales,
principalmente en el
Norte, que más se han beneficiado del actual modelo de desarrollo, de
reconocer
y hacer restitución y reparación por las deudas sociales, ecológicas, e
históricas que han acumulado hacia los pueblos del Sur. En la práctica,
el
consenso tuvo más que ver con profundizar la liberalización comercial y
financiera, fortalecer el poder del capital transnacional, y privatizar
la
financiación para el desarrollo.</span><span style="" lang="ES"><o:p></o:p></span></div>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">Las
preocupaciones expresadas entonces por Jubileo Sur y otras , en el
sentido que ello sólo paralizaría los esfuerzos nacionales para
garantizar un
desarrollo sustentable y soberano basado en la justicia y la
distribución, por
desgracia, se han demostrado estar bien fundamentadas. Ni siquiera se
han
cumplido las limitadas promesas. El Consenso de Monterrey subrayó la
necesidad
de "abordar los problemas de la deuda de los países en desarrollo",
por ejemplo, pero las iniciativas para la cancelación de la deuda han
quedado
muy por debajo de los requisitos para el logro de los objetivos de
desarrollo
humano y justicia social y ambiental. Su alcance ha sido limitado y
siguen
imponiéndose condicionalidades. Enormes cantidades de recursos
necesarios para
el desarrollo han continuado fluyendo del Sur al Norte<b>. La realidad
de la
deuda ilegítima como aquella que no puede ser legítimamente reclamada
como una
deuda de los pueblos del Sur ya que implica la violación grave de los
presupuestos básicos de los contratos de deuda, tanto<span style=""> </span>como
de normas y principios éticos, valores sociales,
políticos, económicos, jurídicos y ambientales de amplia aceptación,
fue
prácticamente ignorado en Monterrey, </b></span><span style=""
lang="ES">y el compromiso de promover
mecanismos capaces de hacer participar a los prestamistas y los
prestatarios en
la resolución de los conflictos relacionados con la deuda aún no se ha
abordado.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">Otros
compromisos asumidos para garantizar que las necesidades, intereses y
plena participació</span><span style="font-family: Times;">n</span><span
style=""> </span><span style="" lang="ES">de los países en desarrollo
estuvieran en el centro de
los debates sobre el comercio, las finanzas y el desarrollo tampoco se
han
cumplido, ya que las decisiones sobre cuestiones importantes que
afectan a los
países y pueblos del Sur se siguen tomando entre los gobiernos y las
elites
empresariales del Norte. Otro fracaso de las limitadas promesas fue el
de la
necesidad de que las instituciones financieras multilaterales como el
FMI
previnieran las crisis o que los países del Norte aumentaran la ayuda
sin restricciones
condicionadas y onerosas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin: 6pt 0in; text-indent: 0in;"><span
style="font-size: 14pt;" lang="ES"><b>2.<span
style="font-family: "Times New Roman"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: normal; font-size: 7pt; line-height: normal; font-size-adjust: none; font-stretch: normal;">
</span></b></span><span style="font-size: 14pt;" lang="ES"><b>Crisis
financiera,
alimentaria, climática y energética: es hora de un cambio <o:p></o:p></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">La conferencia
de revisión del FpD se está llevando a cabo en Doha, en un
contexto de grave crisis e incertidumbre. El marco neoliberal de libre
mercado
consagrado en el Consenso de Monterrey ha contribuido de manera
significativa a
la generación de las actuales crisis financiera, alimentaria,<span
style=""> </span>energética y climática que amenazan con
aniquilar cualquier logro conseguido en los últimos años<span style="">
</span>e intensificarse hacia una crisis aún
peor de desfinanciamiento del desarrollo y de devastación social y
ambiental.<o:p></o:p></span><span lang="PT-BR"><br>
</span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span lang="PT-BR">Detrás de estas crisis
están la situación sin resolver de la dominación de la
deuda y el papel sin cambiar de las instituciones financieras y
comerciales
multilaterales, tales como el Grupo del Banco Mundial y el FMI, los
bancos
regionales y la Organización Mundial del Comercio ( OMC). Estas
instituciones
han sido fundamentales en la elaboración y difusión del fundamentalismo
de
mercado y del capitalismo de casino que hoy dominan la economía
globalizada y
han precipitado las múltiples crisis recurrentes.<span style=""> </span>Han
sido muy ineficaces en la prevención o el tratamiento de
las causas básicas sistémicas de esas crisis, ni que decir en la
promoción del
desarrollo.</span><span class="Teletipo"><span style="" lang="ES"><o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">Vale la pena
recordar que la crisis de la deuda desatada en la década de
1980 fue en gran medida el resultado de una anterior crisis financiera
creada
en el Norte. La crisis en el Norte se evitó mediante el aumento de la
explotación y de la guerra y la extracción de un flujo cada vez mayor
de la
riqueza y los recursos naturales del Sur. Al igual que en anteriores
épocas del
colonialismo y la esclavitud, desde entonces los pueblos y los países
del Sur
han venido pagando por los errores y la vil codicia del Norte.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">Ahora, lo que se
propone es más de lo mismo. La crisis financiera es y
seguirá afectando más a los pueblos del Sur, especialmente a los que ya
viven
en situación de pobreza, los pueblos indígenas, las mujeres, los niños
y niñas,
las personas mayores. Millones de puestos de trabajo se están perdiendo
y crece
la presión sobre la ya de por sí pequeña cantidad de recursos
disponibles para
los derechos humanos fundamentales como el bienestar social, educación,
salud,
protección del medio ambiente, y la posibilidad de trabajo digno. El
aumento de
la inflación ya es una realidad en muchos países, y una renovada,
dramáticamente explosiva crisis de deuda parece inevitable. En lugar de
hacer
frente a esta situación, los recursos están siendo utilizados para
rescatar a
la banca, los intereses financieros, y las empresas transnacionales que
han
concentrado los beneficios en los últimos años y que provocaron no sólo
el
colapso financiero, sino también<span style="">
</span>las crisis alimentaria, climática y energética. Se proponen
falsas
soluciones basadas en el mercado para hacer frente a la crisis
climática y
alimentaria por medio de préstamos y de recetas políticas que sólo
exacerban
los problemas y conducen a más endeudamiento ilegítimo. Se está</span><span
style="" lang="ES"> </span><span style="" lang="ES">fortaleciendo y
dando más recursos a las instituciones
financieras multilaterales sin tener en cuenta la forma criminal en que
han
operado durante los últimos decenios, y su insensatez de mantener un
mayor
endeudamiento y el respeto de los principios del libre mercado como
marco para
la acción.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">La respuesta a
la crisis financiera actual demuestra que el problema de la
financiación para el desarrollo no es una falta de recursos sino de
voluntad
política. Si se pueden movilizar más de 3 billones de dólares de los
EE.UU. en
pocas semanas para salvar a aquellos que son responsables de la crisis
actual,
entonces los recursos podrían movilizarse de inmediato para cancelar
incondicionalmente las reclamaciones de deuda ilegítima y asegurar la
restitución y la reparación de las deudas sociales, ecológicas e
históricas<span style=""> </span>acumuladas con los
pueblos del Sur. <b>Esto sería financiación para el desarrollo.<o:p></o:p></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">Los rescates
están concentrando más aún el poder financiero y económico en
manos de una cantidad cada vez menor de conglomerados que se
beneficiará
muchísimo de esta crisis. Al mismo tiempo, los gastos militares
mundiales
siguen creciendo a un nivel sin precedentes. El Instituto de Estocolmo
estima
que esos gastos alcanzaron los U$S 1,3 billones en 2007. Y sin embargo,
doce
años de iniciativas de "alivio de la deuda" generaron sólo unos US$
100 mil millones en deudas canceladas, con grave costo para los
"beneficiarios" que se vieron obligados a aplicar como condición
previa las mismas políticas neoliberales de libre mercado que han
demostrado
poseer consecuencias tan desastrosas. Las promesas de aumento de la
ayuda
también siguen sonando a huecas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="display: none;" lang="ES"><!--[if gte vml 1]><v:shapetype id="_x0000_t75"
coordsize="21600,21600" o:spt="75" o:preferrelative="t" path="m@4@5l@4@11@9@11@9@5xe"
filled="f" stroked="f">
<v:stroke joinstyle="miter"/>
<v:formulas>
<v:f eqn="if lineDrawn pixelLineWidth 0"/>
<v:f eqn="sum @0 1 0"/>
<v:f eqn="sum 0 0 @1"/>
<v:f eqn="prod @2 1 2"/>
<v:f eqn="prod @3 21600 pixelWidth"/>
<v:f eqn="prod @3 21600 pixelHeight"/>
<v:f eqn="sum @0 0 1"/>
<v:f eqn="prod @6 1 2"/>
<v:f eqn="prod @7 21600 pixelWidth"/>
<v:f eqn="sum @8 21600 0"/>
<v:f eqn="prod @7 21600 pixelHeight"/>
<v:f eqn="sum @10 21600 0"/>
</v:formulas>
<v:path o:extrusionok="f" gradientshapeok="t" o:connecttype="rect"/>
<o:lock v:ext="edit" aspectratio="t"/>
</v:shapetype><v:shape id="_x0000_i1025" type="#_x0000_t75" style='width:1in;
height:18pt'>
<v:imagedata src="file:///Miapple/Users/beverly/Library/Preferences/Microsoft/Clipboard/msoclip1
/01/clip_clip_image001.gif"
o:althref="file:///Miapple/Users/beverly/Library/Preferences/Microsoft/Clipboard/msoclip1/01/clip_clip_image002.wmf"
o:title=""/>
</v:shape><![endif]--><img
moz-do-not-send="true"
src="file:///Miapple/Users/beverly/Library/Preferences/Microsoft/Clipboard/msoclip1/01/clip_clip_image003.gif"
v:shapes="_x0000_i1025" height="18" width="72"></span><span style=""
lang="ES"><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin: 6pt 0in; text-indent: 0in;"><span
style="font-size: 14pt;" lang="EN-US"><b>3.<span
style="font-family: "Times New Roman"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: normal; font-size: 7pt; line-height: normal; font-size-adjust: none; font-stretch: normal;">
</span></b></span><span style="font-size: 14pt;" lang="ES"><b>Superando</b></span><span
style="font-size: 14pt;" lang="EN-US"><b> el dilemma de
Doha</b></span><span style="font-size: 14pt;" lang="EN-US"><o:p></o:p></span></p>
<div class="MsoNormal"><span lang="PT-BR">Mientras los gobiernos se
reúnen en Doha,
es de esperar que no sea demasiado tarde para transformar radicalmente
el orden
del día, a fin de responder a los derechos de los pueblos y el medio
ambiente
en todo el Sur global. El proyecto de documento final presentado en
julio
establece un consenso, incluso más débil que en Monterrey, pero todavía
permanecen sobre la mesa de negociación muchas<span style=""> </span>propuestas
que se acercan más a realizar las esperanzas y
las necesidades de un mundo no sólo globalizado, sino lo que es más
importante,
incluyente y justo. <br style="">
<br style="">
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal"><span lang="PT-BR">En ese espíritu, ofrecemos
los siguientes
puntos que consideramos necesarios para poner en práctica un sistema
alternativo basado en la solidaridad, en la justicia social y
ecológica, la
libre determinación de los pueblos y el pleno respeto de los derechos
humanos y
ambientales:</span><span style="" lang="ES"><o:p></o:p></span></div>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt; text-align: justify;"><span
lang="PT-BR"><b>**Anular sin condiciones las
reclamaciones de deuda y respetar el derecho soberano de los países a
tomar
medidas unilaterales para poner fin a los pagos o rechazar las
reclamaciones de
deuda a fin de satisfacer sus obligaciones con los derechos humanos y
ambientales</b></span><span lang="PT-BR">. Las iniciativas tales como
la de los
países pobres muy endeudados (PPAE/HIPC) y la Iniciativa de Alivio de
la Deuda
Multilateral (IADM) han sido incapaces de garantizar el respeto y la
promoción
de los derechos humanos y ambientales, ya que no abordan las causas
profundas
de la crisis de la deuda. Estos sólo tienen como objetivo alcanzar los
niveles
"sostenibles" del servicio de la deuda a fin de garantizar la
continuación del pago de las deudas y la posibilidad de iniciar nuevos
ciclos
de préstamos. No tienen en cuenta la ilegitimidad de las deudas
reclamadas, ni
el impacto del servicio de la deuda. La mayoría de los países
involucrados
continuan con altos niveles de deuda, que se ha visto acompañada de
condiciones
que han exacerbado los problemas estructurales de los países
involucrados y
reforzado las relaciones desiguales de poder. Los problemas actuales de
deuda
de muchos países, incluyendo, en particular, muchos países menos
adelantados
(PMA) y de los llamados de "ingresos medios" con grandes franjas de
la población afectadas, aún no se han abordado y las nuevas deudas -
tanto
externas como internas - continúan acumulándose mientras que la actual
crisis
incluso aumenta más los riesgos. Detener la fuga de recursos es un paso
urgente
para asegurar una financiación adecuada para el desarrollo. La
anulación de la
deuda debe incluir a todos los países del Sur, ser incondicional e
inmediata.</span><span style="" lang="ES"><b><o:p></o:p></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES"><b>**Las
Naciones Unidas deben abordar la cuestión de la deuda ilegítima</b></span><span
style="" lang="ES">. Desde el Consenso de Monterrey, se han producido
importantes avances en
relación con la cuestión de la deuda ilegítima. La decisión unilateral
de
Noruega de cancelar varias reclamaciones sobre la base de "políticas de
desarrollo fracasadas" y "co-responsabilidad" es un precedente
histórico, y ya ha abierto debates sobre deudas odiosas o ilegítimas en
los
foros internacionales, incluida la UNCTAD, el Banco Mundial, y el Club
de
París. La creación de la Comisión de Auditoría de Deuda en Ecuador es
otro
importante logro que constituye un ejemplo para todos los gobiernos
tanto del
Sur como del Norte. El principio de co-responsabilidad de prestamistas
/
prestatarios se reafirmó</span><span style="" lang="ES"> </span><span
style="" lang="ES">en el
Consenso de Monterrey, pero la importancia de abordar la deuda
ilegítima debe
ser reconocida ahora. Por lo tanto, llamamos tanto a los gobiernos del
Sur como
del Norte a utilizar el proceso de FpD para iniciar un diálogo político
sobre
la cuestión de la deuda ilegítima, no sólo como una forma de garantizar
la
plena e anulació</span><span style="font-family: Times;">n</span><span
style=""> </span><span style="" lang="ES">de la deuda, sino también
para poner fin a la
impunidad con la que el sistema financiero internacional sigue operando
en
nuestros países.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES"><b>**Presionar y
apoyar la realizació</b></span><span style="font-family: Times;"><b>n
de</b></span><span style=""><b> </b></span><span style="" lang="ES"><b>Auditorías
integrales y
participativas de la deuda</b></span><span style="" lang="ES"> como un
instrumento para
hacer frente a la crisis de financiación para el desarrollo. Las
auditorías son
herramientas importantes para las y los ciudadanos y los gobiernos con
el fin
de evaluar el impacto y la legitimidad del sistema de endeudamiento y
establecer las bases para sancionar a los responsables de las acciones
ilegítimas e ilícitas, la recuperación de lo que ha sido injustamente
cobrado o
robado, y la institución de nuevas alternativas para el control
soberano sobre
los recursos financieros. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES-AR">Instamos</span><span
style="" lang="EN-GB"> ademá</span><span style="font-family: Times;">s
a</span><span style=""> </span><span style="" lang="ES-AR">las</span><span
style="" lang="ES-AR"> </span><span style="" lang="ES-AR">Naciones</span><span
style="" lang="ES-AR"> </span><span style="" lang="ES-AR">Unidas</span><span
style="" lang="EN-GB"> a:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt; text-align: justify;"><span
lang="PT-BR"><b>**Abordar la cuestión de las deudas
sociales, históricas y ecológicas</b></span><span lang="PT-BR">. Una
forma
importante de la financiación para el desarrollo no es con ¨ayuda¨,
sino
reconociendo la existencia de estas deudas y garantizando la
restitución y la
reparación a los países y pueblos del Sur. La recuperación de la
riqueza
robada, el cierre de los paraísos fiscales y de otros incentivos para
el flujo
continuo de recursos del Sur hacia el Norte también deben ser incluidos
entre
los compromisos para la acción inmediata. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt; text-align: justify;"><span
lang="PT-BR"><b>**Poner fin al poder de instituciones
financieras y comerciales multilaterales como el FMI, el Grupo del
Banco
Mundial, los bancos regionales y la OMC y la imposición de sanciones</b></span><span
lang="PT-BR"> por su responsabilidad en la actual crisis y el
crecimiento de las
deudas ilegítimas y sociales, ecológicas e históricas. Una reforma del
sistema
de cuotas en favor de unos pocos países del Sur no será suficiente para
cambiar
la lógica de esas instituciones.</span><span style="" lang="ES"><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt; text-align: justify;"><span
style="" lang="ES"><b>**Los
proyectos y programas orientados a tratar la crisis climática,
energética y/o
alimentaria no deben ser financiados con préstamos.<span style=""> </span></b></span><span
style="" lang="ES">Deberían
costearlos los gobiernos del Norte, las corporaciones y la élite
mundial que
son los principales culpables de estas crisis. Además debería detenerse
inmediatamente el financiamiento para proyectos destructivos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt; text-align: justify;"><span
style="" lang="EN-US"><b>**Revisar
y revertir los acuerdos comerciales y tratados de protección a las
inversiones.<span style=""> </span></b></span><span style=""
lang="EN-US">Esto debería incluir el poner fin a
la actual Ronda de Doha de la OMC, los acuerdos regional de libre
comercio y el
ilegítimo Centro Internacional para el Arreglo de Diferendos de
Inversión
(CIADI), dependiente del Banco Mundial, y revertir las cláusulas de
trato
nacional y otras similares así como los cambios hechos en los marcos
regulatorios para permitir el libre movimiento de capitals.<span
style=""> </span>Reiteramos la necesidad de que los
productos de los PMA tengan acceso libe de aranceles a los mercados de
los
países desarrolladas según se estipuló en el Programa de Acción de
Bruselas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt; text-align: justify;"><span
lang="PT-BR"><b>**Promover la re-fundación de las
instituciones y mecanismos reguladores para poner fin a la supremacía
de los
intereses financieros sobre los derechos de los pueblos y el medio
ambiente</b></span><span lang="PT-BR">. Esto incluye la adopción de
medidas inmediatas para poner fin a
los fondos buitre, poner fin a los paraísos fiscales, los fondos de
cobertura,
los incentivos excesivos para fines de lucro y mecanismos de evasión
fiscal,
los fondos de capital privado y promover un impuesto a todas las
transacciones
financieras con el fin de poner fin a la especulación y detener la
creación de
conglomerados financieros. El aumento de la “transparencia” no es
suficiente.</span><span
style="background: yellow none repeat scroll 0%; -moz-background-clip: -moz-initial; -moz-background-origin: -moz-initial; -moz-background-inline-policy: -moz-initial;"
lang="ES"><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES"><b>**Apoyar la
construcción de instituciones y mecanismos autónomos de
financiamiento para el desarrollo con base regional, basados en los
derechos
económicos, sociales, ecológicos, de género y de justicia
intergeneracional.</b></span><span style="" lang="ES"> La creación del
Banco del Sur y otros nuevos planes monetarios y financieros
de estabilización en América del Sur, del ALBA y de otras alianzas de
solidaridad y<span style=""> </span>complementariedad
Sur-Sur, son posibles vías para la recuperación de la soberanía y para
abrir
nuevos horizontes hacia un cambio más fundamental. <br style="">
<br style="">
<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES"><b>**Garantizar
el acceso a los servicios esenciales y estratégicos</b></span><span
style="" lang="ES"> tales como salud, educación, agua y saneamiento,
transporte, servicios
financieros, las telecomunicaciones, los fondos de pensiones y los
recursos
energéticos y naturales, </span><span style="font-family: Times;"
lang="ES">protegiéndolos</span><span style="" lang="ES"> de la
privatizació</span><span style="font-family: Times;">n.</span><span
style=""> </span><span style="" lang="ES">Garantizar la aplicación de
políticas que (re)
distribuyan los ingresos, la riqueza y la tierra, que promuevan la
igualdad de
género, racial, étnica y la equidad intergeneracional, y la
conservación,
protección y promoción de los derechos humanos y ambientales.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style=""><span style="" lang="ES">Todavía es
posible que los gobiernos reunidos en Doha garanticen que el
proceso de Financiació</span><span style="font-family: Times;">n</span><span
style=""> </span><span style="" lang="ES">para el Desarrollo de las
Naciones Unidas continuará y
que se basará en un marco de derechos humanos en lugar del derecho al
lucro.
Las soluciones a los retos del financiamiento para el desarrollo no
deben
basarse en el restablecimiento o salvataje de un sistema fracasado,
sino sobre
un cambio del mismo. Hacemos un llamamiento en particular a los
gobiernos de
los países del Sur a unirse para elevar una sola voz y una plataforma
que
abarque estas exigencias y ofrezca una esperanza real y una rendición
de
cuentas a los pueblos del Sur.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt; text-align: justify;"><span
style="" lang="ES"><b><font class="Apple-style-span" size="4"><span
class="Apple-style-span" style="font-size: 14px;">Jubileo Sur<br>
Doha, Qatar –
Noviembre 28, 2008</span></font><o:p></o:p></b></span></p>
<br>
<pre class="moz-signature" cols="72">--
Iolanda Fresnillo
Observatori del Deute en la Globalització
<a class="moz-txt-link-abbreviated" href="http://www.odg.cat">www.odg.cat</a>
<a class="moz-txt-link-abbreviated" href="mailto:iolanda.fresnillo@odg.cat">iolanda.fresnillo@odg.cat</a>
*******************************************
Nova adreça: C. Girona 25 principal, 08010 Barcelona
Nou telèfon: 93 301 17 93
Nou domini: odg.cat
*******************************************</pre>
<br>
</body>
</html>