Un company de Decreixement Vallès n'ha fet arrivar aquesta informació que penso pot interesar als membres de la Ecoxarxa Montseny.<br><br>Salutacions<br>-- <br>;·Diana.<br>. · : : · . . · : : · . . · : : · . . · : : · . . · : : · . . · : : · .<a href="http://kundalinidansa.blogspot.com/" target="_blank"><br>
</a><br><br>"Un article que no es fa
malbé és una tragèdia per als negocis."<br><div class="gmail_quote"><div bgcolor="#ffffff"><i>Manual de publicitat,
1928<br><br></i><br><a href="http://blogs.tv3.cat/senseficcio.php?itemid=37096" target="_blank">http://blogs.tv3.cat/senseficcio.php?itemid=37096</a><br><a href="http://blogs.tv3.cat/senseficcio.php" target="_blank">http://blogs.tv3.cat/senseficcio.php</a><i><br>
<br><font size="4">«Comprar, llençar, comprar»</font><br></i><b><br>Emissió: Dijous 16 de
desembre a les 23h 50'</b><br><br>Existeix una bombeta que dura per sempre? Com
es pot fer servir un xip per “matar” un producte? Com s’ho van fer dos artistes
de Nova York per iniciar una revolta que va aconseguir allargar la vida de tres
milions d’iPods? I què té tot això a veure amb l’Obsolescència
Programada?<br><br>L’Obsolescència Programada és l’escurçament deliberat de la
vida d’un producte per incrementar-ne el consum. L’any 1928 una influent revista
de publicitat en plantejava la necessitat sense embuts: “Un article que no es fa
malbé és una tragèdia per als negocis.” I també és una tragèdia per a la moderna
societat del creixement, que es basa en un cicle cada cop més accelerat de
producció, consum i malbaratament.<br><br>El documental explica la història de
l’Obsolescència Programada des dels seus orígens, cap a 1920 –quan es va formar
un càrtel per limitar la vida útil de les bombetes elèctriques–, fins a casos
actuals que afecten productes electrònics de darrera generació (iPods,
impressores...), passant per la misteriosa desaparició de les mitges de niló a
prova de carreres.<br><i><br></i>(...)<i><br><br><br></i><a href="http://www.tv3.cat/videos/3267530/Comprar-llencar-comprar-a-Sense-ficcio" target="_blank">http://www.tv3.cat/videos/3267530/Comprar-llencar-comprar-a-Sense-ficcio</a><br>
<br><img title="3alacarta" alt="3alcarta" src="http://www.tv3.cat/img/logotip3ac_titol.gif"><a href="http://www.tv3.cat/seccio/3alacarta" target="_blank"> </a><br><br>
<div><span>Dijous, 23.55, a TV3</span> <span>- 16/12/2010</span><span></span>
<h1>"Comprar, llençar, comprar", a "Sense ficció"</h1>
<p>Relata la fascinant història de l'Obsolescència Programada des dels seus
orígens cap al 1920 fins a casos actuals que afecten a productes electrònics de
darrera generació, passant per la misteriosa desaparició de les mitges de niló a
prova de carreres.</p>
<p></p></div><br>::::::::::::::::::::::::::::::::<br><br><a href="http://www.publico.es/ciencias/351722/corta-vida-al-producto" target="_blank">http://www.publico.es/ciencias/351722/corta-vida-al-producto</a><br><br>
<div><img title="publico.es" alt="publico.es" src="http://imagenes.publico.es/resources/archivos/2010/8/9/1281363148179publico-logo.png" width="167" height="30"></div>
<h1>¡Corta vida al producto!</h1>
<h2>Consumo. Buena parte de la basura informática acaba en países del Tercer
Mundo</h2>
<p><i>General Motors primó el diseño sobre la ingeniería para derrotar a
Ford</i></p>
<p><i>Baterías del iPod de Apple estaban diseñadas para durar poco</i></p>
<p><i>El documental se estrena mañana en TV3 y en enero se emitirá en
TVE</i></p>
<p><br></p>
<p><img alt="el tercer mundo, convertido en vertederoPaíses como Ghana, en África, reciben cantidades ingentes de basura informática de los países occidentales. La trasladan en barcos que, presuntamente, cargan material para uso de segunda mano, según las imágenes y los testimonios del documental." src="http://imagenes.publico.es/resources/archivos/2010/12/15/1292390535385basuradn.jpg"><font size="2"><br>
<font size="1">El tercer mundo, convertido en vertederoPaíses como
Ghana, en África, reciben cantidades ingentes de basura informática de los
países occidentales. La trasladan en barcos que, presuntamente, cargan material
para uso de segunda mano, según las imágenes y los testimonios del
documental.</font></font></p>
<p><br></p>
<p style="color: rgb(102, 102, 102);"><span>TONI POLO.</span>
<span>BARCELONA</span> <span>15/12/2010 08:10</span></p><br>La tecnología camina
a mayor velocidad que la sociedad. O que el consumo. O, simplemente, el consumo
y la tecnología no son compatibles. El documental <i>Comprar, tirar,
comprar</i>, que estrena mañana TV3 (en enero se verá en TVE), dirigido por la
alemana Cosima Dannoritzer y producido por Media 3.14 y Article Z, en
coproducción con la televisión autonómica catalana, TVE y Arte France, denuncia
una práctica común en la sociedad de consumo desde hace cerca de un siglo: la
obsolescencia programada, es decir, el recorte deliberado de la vida de un
producto para incrementar su consumo. Es la lucha del negocio contra la
tecnología, y la ética contra el capitalismo.
<p>Un ejemplo: una pieza de la impresora ha dejado de funcionar. Es imposible
imprimir. Es ya una vieja cantinela. "Será difícil encontrar las piezas para
repararla". "Repararla no le saldrá a cuenta". "Sin dudarlo, yo compraría otra".
Las respuestas que el usuario obtiene en tres servicios técnicos distintos
desembocan en una misma propuesta: cómprese una impresora nueva. No son una
coincidencia: <span style="font-weight: bold;"></span>, el mecanismo secreto
que mueve a nuestra sociedad de consumo", se explica en el documental.<span style="font-weight: bold;">"Si el usuario cede, será una víctima más de la
obsolescencia programada</span></p>
<p>El episodio, cercano y cotidiano, permite a la directora alemana Cosima
Dannoritzer repasar cómo la obsolescencia calculada incide en la sociedad
occidental desde los años veinte del siglo pasado, cuando los fabricantes
comenzaron a pensar en incrementar las ventas de sus productos a costa de la
confianza de sus clientes. Un aparato que se estropease en poco tiempo llevaría
al usuario, irremediablemente, a comprar uno nuevo.</p>
<h3><b>La bombilla de Edison</b></h3>
<p>Thomas Alva Edison quería crear una bombilla que iluminara el mayor tiempo
posible. En 1881 puso a la venta una que duraba 1.500 horas. En 1924 se inventó
otra de 2.500 horas. Con la sociedad de consumo en ciernes, aquello no era una
buena noticia para todo el mundo. Diversos empresarios empezaron a plantearse
una pregunta inquietante: "¿Qué hará la industria cuando todo el mundo tenga un
producto y este no se renueve?". Una influyente revista advertía en 1928 de que
<span style="font-weight: bold;">"un artículo que no se estropea es una tragedia
para los negocios"</span>.</p>
<p>Un poderoso <i>lobby</i>, el cártel Phoebus, presionó para limitar la
duración de las bombillas. En los años cuarenta consiguió fijar un límite de
1.000 horas. De nada sirvió que en 1953 una sentencia revocara esta práctica,
porque se mantuvo. No salió al mercado ninguna de las patentes que duraban más
(una, 100.000 horas). Warner Philips, bisnieto del creador de la compañía
Philips, cree que en aquella época no se pensaba en la sostenibilidad. <span style="font-weight: bold;">"Entonces consideraban que el planeta tiene unos
recursos ilimitados</span> y todo lo miraban desde la óptica de la abundancia",
comenta. Él está convencido de que la sostenibilidad y el negocio deberían haber
ido de la mano.</p>
<p>Otro ejemplo destacado en el reportaje es el de la cadena de montaje de John
Ford. El coche modelo T fue un éxito para la industria automovilística
americana, pero tenía un problema que, por aquellas fechas (años veinte), era
todavía incongruente: estaba concebido para durar. Ese fue su fracaso. Desde la
competencia, General Motors, consciente de que no derrotaría a su rival en
ingeniería, apostó por el diseño. Dio retoques cosméticos a sus coches, lo que
le permitió que los clientes cambiaran de utilitario muy a menudo. ¿A quién le
importaba que el motor funcionara diez años, si en poco tiempo cambiaría el
coche por otro de distinto color o con algún arreglo superficial? <span style="font-weight: bold;">En 1927, tras vender 15 millones de unidades</span>,
Ford retiró el modelo T.</p>
<h3><b>Justificaciones sociales</b></h3>
<p>Tras el<i> </i>crash del 29, Bernard London introdujo el concepto de
obsolescencia programada y propuso poner fecha de caducidad a los productos.
"Esto animaría el consumo y la necesidad de producir mercancías", declara la
hija del socio de London. "Encuentro que era una idea genial: las fábricas
continuarían produciendo, la gente seguiría comprando y todo el mundo tendría
trabajo".</p>
<p>En los años cincuenta la sociedad de consumo se había instalado en todo
Occidente. El diseñador industrial Brooks Stevens sentó las bases de esa
obsolescencia programada: "Es el deseo del consumidor de poseer una cosa un poco
más nueva, <span style="font-weight: bold;">un poco mejor y un poco antes de que
sea necesario"</span>. Ya no se trata de obligar al consumidor a cambiar de
tecnologías, sino de seducirlo para que lo haga.</p>
<p>Las fibras de nailon que crearon medias irrompibles no duraron mucho tiempo
en los mercados. No convenía. Tampoco una presunta fibra que repelía la
suciedad. Ni los motores de las neveras que duraran años y años. "Programan
estos cacharros para que cuando los hayas acabado de pagar se rompan", se
quejaba el protagonista de <i>Muerte de un viajante</i>, de Arthur Miller.
<br></p>
<p>Pero en nuestros días, la era de la informática ha creado al consumidor
rebelde. La abogada Elisabeth Pritzker demandó a Apple tras descubrir que las
baterías de litio de los reproductores de música iPod estaban diseñadas para
tener una duración corta. Algo similar le ocurre al usuario al que su servicio
técnico aconseja, en el documental, que cambie de impresora. Después de muchas
investigaciones y rastreos, descubre que la propia máquina, mediante un chip
instalado en sus tripas, es la que provoca que el ordenador envíe un mensaje
para que el cliente acuda al servicio técnico. El usuario se puso en contacto
con un programador informático ruso, que ha dado con la trampa y ha desarrollado
un software para evitar ese abuso. Pero la inmensa mayoría de los usuarios <span style="font-weight: bold;">cede ante la demanda de la máquina, y se compra otra
impresora</span>.</p>
<h3><b>Vertederos en África</b></h3>
<p>Esa nueva impresora, como esa nueva lavadora, tostadora, plancha u ordenador
se convierten en chatarra. Y se recicla. Sin embargo, el documental también
destapa malas prácticas en este terreno. "Antes teníamos un río precioso aquí",
dice el activista medioambiental ghanés Mike Anane.Habla desde un vertedero en
el que destacan las montañas de basura informática. </p>
<p>Ahora, los niños queman el plástico que recubre los cables para recuperar el
metal que está en su interior. "A veces nos ponemos enfermos y tosemos",
declaran esos niños en el documental. El material entra en estos países como
producto de segunda mano, pero sólo el 20% se aprovecha, denuncia la película.
<br></p>
<p><br></p>
<p>:::::::::::::::::::::::::::</p>
<p><a href="http://www.publico.es/ciencias/351751/todos-participamos-en-este-juego" target="_blank">http://www.publico.es/ciencias/351751/todos-participamos-en-este-juego</a></p>
<div><img title="publico.es" alt="publico.es" src="http://imagenes.publico.es/resources/archivos/2010/8/9/1281363148179publico-logo.png" width="167" height="30"></div>
<h1>"Todos participamos en este juego"</h1>
<h2>Cosima Dannoritzer, directora del documental</h2>
<p><span></span><span></span><span style="color: rgb(102, 102, 102);">15/12/2010
08:10<br><br></span></p>
<div>
<p style="font-weight: bold;">1. ¿Cómo se le ocurrió la idea de hacer este
documental?</p>
<p>Quería separar las muchas leyendas urbanas que existen de los hechos. Se
habla de una bombilla que no se gasta, de un coche que funciona con agua...</p>
<p style="font-weight: bold;">2. ¿Qué es lo más preocupante?</p>
<p>Dos aspectos. El primero es el medioambiental; se generan demasiados
residuos. Sólo con que cambiáramos de móvil cada dos años en lugar de cada año,
reduciríamos los cerca de nueve millones de toneladas que se generan en Europa,
el 75% de las cuales va a parar ilegalmente a países del Tercer Mundo. El otro
aspecto es plantearnos si no será ya demasiado tarde para cambiar.</p>
<p style="font-weight: bold;">3. ¿Siente que nos están tomando el pelo?</p>
<p>No, por la sencilla razón de que lo permitimos. Todos participamos en el
juego del consumismo. Por ejemplo, nos encanta ir de compras. Y es cierto que
cada modelo tiene algo nuevo que no tenía el anterior, pero no hace falta ir tan
deprisa. Cuando nos aprendemos el manual de instrucciones de un aparato ya lo
tenemos que cambiar. Por otro lado, estamos tan absorbidos que cuesta pensar de
otra manera.</p>
<p style="font-weight: bold;">4. ¿El documental es una denuncia?</p>
<p>No. Sólo pretende motivar al espectador, que debata, busque ideas y se apunte
a proyectos. Se trata de plantearnos que las cosas podrían funcionar de otra
manera. También pretendo que la gente se lo pase bien, claro.</p>
<p style="font-weight: bold;">5. ¿Es optimista ante el futuro?</p>
<p>Sí, porque hay mucho interés. En el documental aparece gente que ofrece
alternativas. He oído que Ikea vende ahora un mueble para que lo hereden tus
hijos, eso es una gran noticia.</p>
<p><br></p></div>
<p></p>
<p>::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::<br></p>
<p><a href="http://video.google.com/videoplay?docid=-5645724531418649230" target="_blank">http://video.google.com/videoplay?docid=-5645724531418649230</a></p>
<div><font size="6">The Story of Stuff (La Historia de las
cosas)</font><br><br></div>
<div><span></span></div>
<div><span>21:03</span> - <span>2 years ago<br><br></span></div><span style="display: block;">Versión doblada al español del video de Annie Leonard.
<br>Producción del Video: Free Range Studios. <br>Doblaje al castellano:
Asociación Civil El Agora, Argentina. <br>El video original en inglés puede ser
visto en <a href="http://www.storyofstuff.com/" target="_blank">http://www.storyofstuff.com/</a></span><br clear="all"></div></div>
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